A principios de agosto, un chip Neuralink desarrollado por la empresa de Ilon Musk se implantó con éxito en un segundo paciente. Tras solo un par de semanas, el hombre aprendió a jugar con la mente al shooter en línea Counter-Strike 2.
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El paciente se llama Alex y es de Estados Unidos. El hombre tiene una lesión medular que le dejó las extremidades paralizadas. Le implantaron un chip en el Instituto Neurológico Barrow: le dieron el alta al día siguiente de la operación y su recuperación, según la empresa, «fue como la seda».
Alex empezó controlando el cursor del ordenador: tardó unos cinco minutos en dominar esta tarea. Pronto fue capaz de manejar la interfaz del PC con soltura. Ahora el hombre llevó sus habilidades al siguiente nivel: aprendió a jugar a Counter-Strike 2.
