Especialistas de la comunidad estadounidense de entusiastas de la ingeniería iFixit desmontaron la novedad y llegaron a la conclusión de que es completamente inadecuada para su reparación. Es decir, en caso de rotura, el anillo se convertirá en basura electrónica.
Publicidad
Samsung ha tomado una serie de medidas para que sea lo más duradero y fiable posible. El Galaxy Ring presume de resistencia al agua y al polvo IP68, puede soportar la presión del agua a gran profundidad y cuenta con un armazón de titanio de grado 5. Todo esto es impresionante y cumple bien su función, pero hay un componente que inevitablemente se degrada con el tiempo: la batería. Y, por desgracia, sustituirla es una tarea imposible. Está sellada en el interior, por lo que no se puede acceder a ella sin destruir el propio dispositivo.